La madera es un elemento natural que nos encanta en los
muebles y en determinadas estructuras de nuestra vivienda como suelos, puertas
o vigas. Es un elemento que aporta calidez en nuestro hogar y que presenta
acabados de gran estilo y belleza. Pero estas piezas de madera tienen varios
enemigos temibles: la carcoma,
la termita y los hongos
de pudrición.
Todos ellos provocan importantes desperfectos y deterioro en
nuestro mobiliario y estructuras llegando a poner en riesgo la funcionalidad de
estos incluso.
La mejor forma de evitar estos ataques y su consecuente deterioro
es protegerlos previniendo el ataque de dichos agentes xilófagos.
Tratamientos preventivos de la madera
Los fabricantes de mobiliario de madera y madera destinada a
la construcción aplican a sus piezas tratamientos antixilófagos. Estos consisten
en la administración de determinados productos y barnices que actúan como capa
protectora impidiendo la entrada y acción de insectos xilófagos como la carcoma
y las termitas o los hongos de la madera.
Con el paso del tiempo estos tratamientos van perdiendo
eficacia, por lo que nuestras piezas de madera se irán volviendo cada vez más
vulnerables a la acción de estas plagas de la madera.
Para evitar esto es recomendable realizar inspecciones
periódicas para comprobar que nuestros muebles y estructuras están limpias de
estas presencias. También es muy recomendable realizar tratamientos
preventivos.
Para la realización de estos tratamientos de la madera de carácter preventivo se debe de acudir a una empresa de control
de plagas profesional, como NATUR CONTROL. Una empresa de control de plagas cuenta
con personal técnico especializado en tratamiento de la madera
experimentado y capacitado para aplicar el tratamiento más adecuado según la
pieza a tratar, la presencia o no de insectos u hongos o el nivel de riesgo
considerado (por factores ambientales propicios, etc.).
Consejos para prevenir las plagas de la madera
Las termitas, la carcoma y los hongos
xilófagos necesitan de determinadas condiciones ambientales y orgánicas
para reproducirse y propagarse. Algunas de estas condiciones son:
- Temperatura elevada
- Humedad elevada
- Suciedad
- Madera en mal estado
- Madera agrietada
- Otros muebles o piezas ya contaminadas por xilófagos
Ante esto, una manera de prevenir la aparición de plagas
de la madera es tratar de controlar nuestro entorno para eliminar estas
condiciones óptimas.
Por ello podemos realizar determinadas acciones nosotros
mismos en casa:
- Mantener la humedad por debajo de un 60%. Para conseguirlo en verano es adecuado el uso de aires acondicionados y en invierno los deshumidificadores.
- Mantener las estancias ventiladas.
- Dejar entrar la luz solar siempre que sea posible; esta mantiene a los hongos alejados y contribuye a eliminar la humedad.
- Mantener los muebles y piezas de madera limpios.
- Almacenar madera fuera de casa.
Pero
siempre debe de tener muy en cuenta que, ante la mínima sospecha de presencia
de termitas, carcoma u hongos de la madera en su hogar,
debe ponerse en contacto
con una empresa de control de plagas
para llevar a cabo un tratamiento curativo. Una presencia aislada de cualquiera
de estos agentes xilófagos puede convertirse rápidamente en una plaga.